Durante el juicio, el acusado de abusar sexualmente de la hija de su pareja cuando era menor ha negado los hechos, mientras que la víctima se ha ratificado en su denuncia. La fiscalía mantiene su petición de condena a cuatro años y medio de cárcel y 10.000€ de indemnización. El Ministerio Público ha retirado la solicitud de expulsión del acusado debido a su arraigo y situación familiar. La acusación particular reclama siete años y medio de prisión y 15.000€ de indemnización. El Gobierno regional ha considerado la diferencia de edad y la posición del acusado en la familia.
La joven, que está a punto de cumplir 18 años, ha declarado que su padrastro intentaba tocarla en varias ocasiones, mientras que él niega haber accedido a su habitación salvo en momentos puntuales y acompañado de su esposa. La víctima ha recibido tratamiento psicológico y presenta secuelas emocionales en el ámbito familiar, sexual y académico.
Los técnicos que intervinieron para asistir a la menor han descrito su estado de angustia, vergüenza e intimidación. Las psicólogas que evaluaron a la joven han afirmado que su relato era coherente y verosímil, descartando animadversión hacia su padrastro. La defensa ha presentado una pericial psiquiátrica que cuestiona la veracidad del testimonio de la víctima. El juicio ha quedado visto para sentencia.