A las 9:00 de este viernes, dos cazas del Ejército del Aire y del Espacio despegaron a 8.000 metros para interceptar un avión de carga A400M que volaba entre la base de Torrejón de Ardoz (Madrid) y la de Morón (Sevilla). EL PAÍS fue invitado a esta demostración que marca la conclusión del Pacific Skies, una expedición alrededor del mundo en la cual el Ejército del Aire y del Espacio, con su agrupación Plus Ultra, ha logrado importantes logros para las Fuerzas Armadas. Este periplo incluyó el primer despliegue español en Australia, en la India y en Japón, así como la primera ocasión en la que un piloto español se ha entrenado con un caza indio y España ha posicionado un A400M en las antípodas. El teniente general Francisco González-Espresati, al mando de la agrupación, afirma que esta gesta es equiparable a las realizadas a principios del siglo XX.
Durante el Pacific Skies de este año, que tuvo lugar del 26 de junio al 15 de agosto, 240 militares del Ejército del Aire y del Espacio recorrieron 400.000 kilómetros en 56 días, pilotando aviones europeos como los Eurofighters y los aviones de transporte A400M. Participaron en tres ejercicios multinacionales de alto nivel en Alaska (EE. UU.), Australia y la India. El objetivo de la misión, según González-Espresati, era lanzar un mensaje de apoyo en diversos ámbitos a los aliados de la zona del Indo-Pacífico.
En el ejercicio Arctic Defender, celebrado en Alaska, los cazas simularon un combate en un escenario de alta complejidad. Luego, en el ejercicio Pitch Black, España logró colocar un avión A400M en Nueva Zelanda, y finalmente participaron en el ejercicio Tarang Shakti en la India. El clima extremo fue uno de los desafíos a los que se enfrentaron los militares durante la misión, enfrentándose a condiciones polares en Alaska, tropicales en la India y desérticas en Australia, así como volando en plena época del monzón.
A pesar de haber sido un éxito rotundo, España no volverá a participar en un Pacific Skies en un futuro cercano debido a la escasez de personal. Sin embargo, es probable que regresen a Australia en 2026 para alguna misión o ejercicio fuera del marco de este evento.