Había una vez un ciclista que participó en la Vuelta con una fractura en una vértebra. A pesar del dolor constante que sentía, Primoz Roglic, triple ganador de la carrera, se mantenía como favorito. Sus directores deportivos lo veían como el ogro del certamen, pero desde el equipo Bora lo admiraban como un príncipe capaz de vencer a los dragones. Después de superar el Picón Blanco, Roglic se convirtió en el líder absoluto de la carrera. A pesar de la lesión en la espalda, Roglic demostró su determinación etapa tras etapa, hasta llegar a la última contrarreloj como el mejor de todos los aspirantes.
A pesar de las molestias, Roglic no perdió la compostura y siguió luchando en la carrera, superando etapas duras y llegadas en alto. A pesar de los rumores sobre su lesión, Roglic demostró una capacidad excepcional para recargar energía y seguir adelante. Su victoria en el Alto de Moncalvillo y el Picón Blanco lo consolidaron como líder absoluto de la Vuelta.
En la etapa del Picón Blanco, el Bora sufrió dificultades y perdió algunos corredores, pero Roglic se mantuvo firme. A medida que se acercaba la etapa final, Roglic supo resistir los ataques de sus rivales y mantener su posición de líder. La contrarreloj final será decisiva para determinar el podio de la Vuelta, con O’Connor, Mas y Carapaz luchando por completarlo.
Groves se coronará como el ganador del maillot verde, Vine en lunares, Skjelmose como mejor joven y el UAE como el mejor equipo. Roglic y el equipo Bora celebrarán su victoria en Madrid al final de la Vuelta.
Una contrarreloj para acabar y decidir el podio
La contrarreloj final de 24,6 kilómetros resolverá la Vuelta, con Roglic como claro favorito. O’Connor, Mas y Carapaz lucharán por las posiciones restantes en el podio, con Mas confiado en sus habilidades en la contrarreloj para alcanzar el segundo lugar. Carapaz tendrá que esforzarse para alcanzar el podio, ya que se encuentra detrás de O’Connor y Mas en la clasificación general.
Otros ganadores de la Vuelta incluyen a Groves como mejor sprinter, Vine como rey de la montaña, Skjelmose como mejor joven y el UAE como mejor equipo.
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